Atención a Domicilio

El servicio de atención terapéutica a domicilio surge ante la necesidad creciente de atender a las personas en sus casas o lugares de residencia. Todos y cada uno de los grupos de edad poblacional se pueden beneficiar de la atención a domicilio, desde menores de edad hasta ancianos.

La visita a domicilio implica un elevado grado de confianza terapéutica y el trato directo entre el paciente y el profesional, que hace que la relación sea más cálida y humana. Uno de las múltiples ventajas de la atención a domicilio es observar de primera mano el lugar en el que habita y se desenvuelve el paciente. La información que puede recoger de la casa, el entorno y los familiares conviventes es muy valiosa de cara a planificar un tratamiento.

Una de las indicaciones médicas para un abordaje domiciliar son los trastornos de conducta. Además, pacientes con movilidad reducida y/o trastornos mentales graves que puedan tener dificultades  para desplazarse hasta la consulta son candidatos a asistencia domiciliar.

Ejemplos de pacientes que se pueden beneficiar de la consulta en sus hogares son:

ADOLESCENTES

Aislamiento social

Problemas de comunicación con padres

Rendimiento escolar insuficiente

Consumo de sustancias

Alteración del comportamiento

ADULTOS

Agorafobia

Fobia social

Crisis de Ansiedad

TOC

Depresión Mayor

Psicosis

ANCIANOS

Depresión

Deterioro cognitivo

Alteraciones conductuales

Preocupación por la salud